Hasta la última gota – Al rescate del agua en Chile

Tomado: DW

En Chile, la sequía ya no afecta solo al norte del país. El incremento de temperaturas sumado al descenso de las precipitaciones han hecho saltar todas las alarmas en numerosas regiones.

Chile se seca. En algunas zonas del país, el cambio climático y la mala gestión han reducido el agua disponible en un 37% en los últimos años. Además el agua, alimento de los ecosistemas, está mal repartida en el país. Según cifras del Movimiento de Defensa del Agua, la agricultura chilena consume cerca del 77% del agua disponible, seguida de la industria y la minería con un 16%. Para agua potable y saneamiento queda menos del 6% del total. Cada vez más chilenos exigen una reforma del Código de Aguas de 1981, un documento redactado durante la dictadura, que desvincula el agua de la tierra y ha quedado obsoleto. Aunque en regiones como Petorca el 90% del territorio siga copado por cultivos intensivos de aguacate que demandan cantidades ingentes de agua, en esa y otras regiones comienzan a surgir alternativas de producción agrícola sostenible. Es el caso del agricultor Iván Aguilera, quien recurriendo a la lombricultura y los residuos orgánicos, logra retener la humedad de sus cultivos reduciendo en un 80% la necesidad de riego. El reciclaje de aguas grises es otra de las estrategias empleadas en Chile para hacer frente a la sequía. Un proyecto aplicado por la Fundación Chile cambió la vida del pueblo Cerrillos de Tamaya. Allí, se recoge el agua vertida por lavamanos, bañeras y lavadoras, se filtra y purifica para regar un campo de alfalfa de cinco hectáreas. Gracias a esta iniciativa, Cerrillos de Tamaya es el único lugar de la zona donde el ganado no muere de hambre ni de sed. La Fundación “Un Alto en el Desierto” suma la cosecha de agua al reciclaje de aguas grises. En la Reserva Ecológica de Cerro Grande, esta fundación instaló paneles atrapanieblas para cosechar la niebla procedente del mar. Un país como Chile, con más de seis mil kilómetros de costa, podría cosechar así grandes cantidades de agua en todo el país. “Un Alto en el Desierto” coopera con escuelas de la región de Coquimbo para que los más jóvenes sean los principales abanderados de la cosecha y el reciclaje agua. Son ellos quienes deberán convivir más tiempo con la sequía, aprovechando hasta la útima gota.

Be the first to comment

Leave a Reply