Nos sumamos a los justos reclamos de los camioneros

Tomado: CNSSP

La CNSSP se solidariza con las justas exigencias de las agremiaciones de pequeños y medianos transportadores de carga que, hoy, resisten en el paro nacional. Rechazamos rotundamente las amenazas y la represión del gobierno que, a la vez que señala que el paro de los camioneros no existe, los sindica del desabastecimiento de las ciudades y, a través del fiscal títere, les anuncia la expropiación de sus vehículos.
Mientras el régimen trata de esa manera a los transportadores dueños de uno o unos pocos camiones, cuya propiedad muchas veces es compartida por varias familias, favorece a los grandes monopolios de la intermediación de carga como Colfecar, Asecarga, Defencarga, Fedetranscol. Estos gremios representan a empresas multimillonarias que someten a la mayoría de camioneros prácticamente a la extorsión y, a los conductores asalariados, a lesivas condiciones laborales. Los intermediarios violan, con la abierta complicidad del Ministerio del Transporte, normas legales como la obligación de suministrar la información de los fletes pactados y les pagan a los transportadores por debajo de los valores del llamado Sistema de Información de Costos Eficientes para el Transporte Automotor de Carga (Sicetac). Así, los monopolistas se quedan con alrededor del 50 % de los fletes, haciendo ruinoso el negocio para la mayoría.
Aparte de la subcontratación, los camioneros padecen otras iniquidades como el desmesurado precio de los combustibles, manejado por el gobierno, y el alza sistemática de los peajes, acompañada de la instalación de nuevas casetas en las vías ya concesionadas y, a cada vez menos kilómetros de distancia, en las nuevas. Sin embargo, a las carreteras prácticamente no se les hace mantenimiento; todo para beneficiar a los magnates financieros de las concesiones, como es el caso del grupo Aval de Luis Carlos Sarmiento Angulo. Los combustibles y peajes corresponden al 47 % de los costos de operación del sector.
La Coordinadora Nacional Sindical, Social y Popular acompaña a los más de 200.000 camioneros tradicionales en sus exigencias de congelar el precio de los combustibles y de los peajes, abolir la intermediación de los grandes conglomerados con los generadores de carga, actualizar el Sicetac, negociar un programa de modernización del parque automotor, entre otras reivindicaciones.
Exaltamos su valeroso aporte al paro nacional que hoy desarrolla el pueblo colombiano contra el
nefasto gobierno de Iván Duque.

¡Por la vida, pan, techo, salud, educación, trabajo, pensión y servicios públicos para todos!

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